El presidente del Partido Popular de Huelva, Manuel Andrés González, ha puesto en valor este martes la gestión de los gobiernos populares en la provincia, destacando que la Diputación ha destinado más de 10 millones de euros en inversiones a los municipios de Alosno, El Almendro, Tharsis, Puebla de Guzmán, Villanueva de los Castillejos y San Bartolomé de la Torre.
Durante una visita a este último municipio, acompañado por la secretaria general del PP de Huelva, Berta Centeno, González ha subrayado que estas inversiones son «una muestra clara del compromiso del Partido Popular con el bienestar de los vecinos y el desarrollo de sus pueblos, en contraposición al abandono que sufre Huelva por parte del Gobierno de Pedro Sánchez».
Entre los planes que ha detallado el líder popular se encuentra ‘Tu Diputación Invierte’, que destina 1,55 millones de euros a infraestructuras y equipamientos municipales, y el Plan de Concertación, con 1,85 millones para atender necesidades urgentes. Además, ha resaltado los 2,42 millones del Plan de Turismo Sostenible y los 191.000 euros del programa PFEA-Materiales.
Uno de los proyectos más relevantes que ha citado es la planta de tratamiento de residuos del Andévalo, que supone una inversión global de 4,3 millones de euros. Según ha explicado, la primera fase ya está en marcha con 2 millones, mientras que la segunda, dotada con 2,3 millones, se ejecutará a lo largo de este año.
“Solo en San Bartolomé de la Torre, donde hoy nos encontramos, la Diputación ha invertido más de 1,3 millones de euros”, ha enfatizado González, como ejemplo del “modelo de gestión eficaz y cercano del Partido Popular”.
Por el contrario, ha criticado duramente al Ejecutivo central por «la falta de inversiones» en la provincia. «Desde que Pedro Sánchez llegó a la Moncloa, Huelva ha caído en el olvido en materia de infraestructuras, transporte, carreteras y recursos hídricos», ha afirmado.
Asimismo, ha reprochado el «silencio cómplice» del PSOE de Huelva y de su secretaria general, María Eugenia Limón, ante lo que considera «una constante marginación del Gobierno a los intereses de los onubenses».