Por 
Asunción Grávalos, ha mantenido una primera reunión de trabajo con el director de la Prisión Provincial, Alejandro Zulueta, para analizar la situación del centro penitenciario onubense y conocer, de primera mano, la labor de reeducación y reinserción social que desarrolla esta institución.
Zulueta ha puesto de manifiesto a la subdelegada la importancia de la tarea que desempeñan los trabajadores penitenciarios «para la seguridad ciudadana, cuya misión es la retención y custodia de detenidos, presos y penados y su reinserción en la sociedad». «En el centro penitenciario, con mayor prevalencia que en el mundo libre, existen carencias sociales, educativas y culturales, comportamientos agresivos y antisociales, trastornos mentales y conductas adictivas», ha remarcado Zulueta, antes de resaltar la existencia en la prisión onubense de «una amplia programación y actividades por el que ofrecemos a los internos los instrumentos que les ayuden a su integración en la sociedad».
En este sentido, el director de la prisión ha destacado la importancia del trabajo productivo, los cursos de formación, los talleres ocupacionales, el Club de Lectura o la Unidad de Enseñanza CEPER ‘Miguel Hernández Gilabert’.
La subdelegada se ha interesado por el trabajo que desarrollan los empleados públicos en el centro penitenciario, así como de los distintos programas de atención que se llevan a cabo en la cárcel onubense para colectivos específicos de internos, como el dirigido a personas con discapacidad intelectual o a reclusos drogodependientes. En la ejecución de estos programas, Zulueta ha subrayado la «colaboración activa» de varias instituciones y ONG, como la Universidad de Huelva, Cruz Roja o Proyecto Hombre.
