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Al grito de asesino, asesino Bernardo Montoya era trasladado a las nueve y cuarto de la mañana de hoy desde la la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva hasta los juzgados de Valverde del Camino con el objeto de ponerlo a disposición de la titular del Juzgado de Instrucción número uno, encargado de la investigación.

Los acontecimientos entorno al caso de la joven profesora Laura Luelmo, se siguen sucediendo conforme pasan los días desde primero su desaparición y especialmente desde que su cuerpo apareciese en Las Mimbreras, cerca del El Campillo el pasado lunes 17.

Desde la detención del autor confeso de Laura Luelmo el pasado martes entorno a medio día, Bernardo Montoya, fue trasladado al Cuartel de la Guardia Civil de Valverde y posteriormente al de la capital, lugar en el que se le tomó declaración al día siguiente y confesó haber acabado con la vida de la joven profesora.

Esa misma tarde los agentes llevaron a Bernardo a su casa a la localidad de El Campillo, dónde vivía para proceder a la reconstrucción de los hechos. Vecinos de El Campillo  recibían al autor confeso de la muerte de Laura Luelmo al grito de asesino asesino al igual que en Huelva lo despedían esta mañana a su salida de la Comandancia de la Guardia Civil desde dónde era trasladado hasta los juzgados de Valverde del Camino con el objeto de ponerlo a disposición de la titular del Juzgado de Instrucción número uno, encargado de la investigación.

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