La devoción del pueblo bonariego en torno a su patrona impregnó cada rincón de Bonares un nuevo 22 de octubre. Este día está marcado en rojo en el calendario local porque cada año tiene lugar la salida procesional de Santa María Salomé.
Una procesión caracterizada porque los quintos son los encargados de portar sobre sus hombros a la Santa para impregnarse así de ese amor tan especial que se inculca de padres a hijos.
Tras culminar la Función Principal comenzó una procesión que ha arrojado momentos cargados de emociones y sentimiento.
Desde el consistorio bonariego también quisieron acompañar a su Santa durante su caminar por las calles del municipio y realizar una ofrenda floral muy especial.
Los vecinos y vecinas de Bonares han hecho una pausa a sus fiestas para acompañar a su Santa y continuarán viviendo intensamente sus Fiestas Patronales, que se prolongarán hasta el próximo 26 de octubre.