La cantaora Carmen Molina, hacía más de un año, le había expresado a Manolo Salúcar su deseo de grabar una de las míticas canciones del fallecido compositor y guitarrista: “La canción de Andalucía”.
El artista sanluqueño ofreció su total disposición y le entregó la partitura completa y la libertad de interpretar la canción con la instrumentación que deseara.
Con esta interpretación, la cantaora expresa su amor a su tierra, a su indentidad y a la cultura que la ha moldeado como artista. Y, por supuesto, representa un homenaje a la figura del maestro Manolo Sanlúcar, un hombre, que en palabras de la artista, amó tanto a Andalucía, «que se fundió con ella».