Estudiantes de la Universidad de Huelva han estado durante un mes realizando una acampada en el Campus del Carmen para concienciar y visibilizar sobre la Guerra en Gaza.
Además, han realizado otras actividades divulgativas y de concienciación dando charlas en institutos onubenses.
Sobre el conflicto en Gaza, han animado a posicionarse en contra de lo que está ocurriendo. Y han leído un manifiesto, en la pradera situada junta a la escultura de la Paz en el Campus de El Carmen, en el que han agradecido los servicios que les ha proporcionado el Rectorado de la Universidad onubense mientras estaban acampados.
Por último, los manifestantes han hecho un llamado a las instituciones educativas a romper relaciones con Israel, a no establecer relaciones en el futuro y a dejar de comprar productos de empresas que lo financien u apoyen de cualquier manera.
MANIFIESTO
Desde la acampada de la Universidad de Huelva queremos reconocer la ayuda que nos ha proporcionado el Rectorado en cuanto al espacio y las facilidades, como han sido los aseos portátiles, la iluminación y la fuente de corriente, lo que nos ha permitido no dejar de lado nuestras responsabilidades académicas y laborales. Gracias a esto, hemos podido realizar una labor de concienciación y de activismo de una forma muy cordial con respecto a la universidad. Esto no ha sido un factor común en el resto de acampadas universitarias en España, y queremos aprovechar este momento para expresar nuestro apoyo a las compañeras de lugares como Sevilla o Vigo, donde la violencia ha estado presente por parte de las autoridades a pesar de la intención pacífica del estudiantado.
Consideramos necesario aclarar que este comunicado es independiente de la Universidad de Huelva, quienes han tomado sus propias decisiones respecto a su manera de posicionarse en cuanto al conflicto, con las limitaciones que implica ser una institución universitaria. Ahora bien, como colectivo queremos expresar una serie de puntos clave en nuestro discurso. En primer lugar, reconocemos el Estado de Palestina como único gobierno legítimo en el territorio. Israel es, en todo caso, una consecuencia del colonialismo occidental y no tiene derecho alguno a usurpar una tierra que no les pertenece.
En segundo lugar, denunciamos el genocidio que el pueblo palestino lleva sufriendo desde el principio de la colonización sionista en 1948. La nakba no fue un suceso aislado, sino un proceso que se sigue desarrollando y lo seguiremos denunciando mientras ocurra.
En tercer lugar, condenamos enérgicamente la violencia ejercida sobre los estudiantes que se han manifestado, insistimos, de forma pacífica en otras instituciones universitarias. Creemos que ha sido totalmente innecesaria y apoyamos la lucha de los estudiantes que se levantan ante un genocidio contra las universidades que mantienen relaciones directas con Israel. También condenamos el establecimiento y mantenimiento de relaciones directas entre instituciones universitarias internacionales y este estado genocida. Un país que comete esta clase de atrocidades no debería tener cabida en ninguna organización ni asociación de naciones.
Por último, llamamos a las instituciones educativas a romper relaciones con Israel, a no establecer relaciones en el futuro y a dejar de comprar productos de empresas que lo financien o apoyen de cualquier manera.
Nuestro posicionamiento es claro:
La lucha no debe parar aquí y no debemos detenernos hasta que el genocidio palestino se detenga, ni como jóvenes ni como personas. Esto es una cuestión de Derechos Humanos. ¡Viva Palestina libre!