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La provincia de Huelva acogió su Domingo de Corpus. Una de las jornadas más especiales del calendario festivo para varias localidades que rinden pleitesía al Santísimo Sacramento que protagoniza la procesión más importante del año. Las calles se alfombraron de romero, helechos y juncia y los altares salieron de las iglesias para llenar de solemnidad el recorrido de la sagrada forma.
El Huelva, desde la Catedral de la Merced, la custodia de Marmolejo volvió a brillar con el sol de la mañana. A las 10, comenzó a salir un nutrido cortejo conformado por todas las hermandades de penitencia y gloria de la Ciudad, así como las asociaciones religiosas y autoridades políticas y militares. El Obispo cerraba la procesión tras el paso del Corpus que llegó un año más hasta la parroquia de la Concepción a través de un recorrido donde se dispuso un altar del 800 aniversario de la Merced y o otro por la asociación de la Virgen de las Mercedes.
En Palos de la Frontera se celebró la solemnidad del Corpus rodeado de niños y niñas de comunión, demostrando que de todas sus procesiones, esta es la más importante. Más de 20 altares se habilitaron en todo su recorrido bendecidos por el Corpus en una de las jornadas más tradicionales de la provincia.
