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Los jardines de la ciudad es uno de esos lugares donde el onubense sana su alma. Y ahora, desde la culminación de las obras del entorno del templo, la hermandad luce ahora la terminación de los jardines interiores del santuario, 50 años después de su apertura. Se han vuelto a poner en funcionamiento las fuentes y se ha remozado toda la jardinería.
Los jardines, de estilo hispano árabe, ofrecen ahora su mejor cara con la restauración de3l monumento de la Virgen de la Cinta en el lugar donde fue refugiada en los sucesos del 36, donde se han dispuesto nuevos azulejos de todas las patronas andaluzas.
También se ha pavimentado el acceso al cinerario, lugar donde reposan las almas de los cinteros, además de su nueva iluminación. En definitiva, los jardines se han convertido en la guinda del entorno más bello de la ciudad.
