Por Los Reyes Magos volvieron a llenar de ilusión y de esperanza las calles de Huelva. Catorce carrozas con temáticas muy variadas, relacionadas con la literatura infantil y entre las que pudimos ver una dedicada al 75 aniversario del Colegio Funcadia, otra de personajes como Batman o el tradicional Portal de Belén.
Unos inmensos dinosaurios abrieron la boca de los más pequeños por las avenidas de la capital, anunciando a todos los onubenses que sus Majestades los Reyes ya estaban en Huelva. Melchor, Gaspar y Baltasar repartieron casi cuatro millones de caramelos a lo largo de un recorrido que no pudo empezar como es tradicional desde el entorno del santuario de la Cinta, aunque los Reyes sí se postraron ante la patrona de Huelva antes de partir para mirar a la cara a los miles de pequeños que esperaban absortos su magia.
Para que no faltara tampoco color, unos 200.000 rollos de serpentinas y casi mil kilos de confeti se derramaron por las aceras dejando esa esencia única de un 5 de enero.
Después de vertebrar la ciudad de cabo a rabo, los Reyes llegaron a las puertas del Ayuntamiento desde el que lanzaron su último mensaje antes de abandonar las calles y ponerse manos a la obra y repartir los millones de regalos cargados de emoción, porque al final un día de Reyes es el resumen de la felicidad y la ilusión más plena que puede sentir el ser humano, precisamente porque nace del corazón que todos tenemos de niño.
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