La consejera ha recordado en la Comisión de Fomento del Parlamento de Andalucía que el nuevo acceso a Isla Cristina desde la A-49 fue licitado por el anterior gobierno socialista a mediados de 2018. Sin embargo, una vez se adjudicó la obra por 813.000 euros, el proyecto redactado para la reforma del puente “no resolvía la patología global de la estructura, lo que provocó la rescisión del contrato”.
“Lejos de quedarnos de brazos cruzados, hemos actuado empezando desde cero con la redacción de un nuevo proyecto que resuelva verdaderamente este problema de seguridad vial”, ha manifestado Marifrán Carazo. Durante el año pasado, se encargó un estudio de diagnóstico del puente para conocer su estado real y sus problemas estructurales y, sobre esas conclusiones, se redactó un nuevo proyecto de construcción que concluyó a finales de 2020.
“La pérdida de este tiempo tan valioso ha provocado que ahora sea una actuación de emergencia pues los daños ahora son más severos”. Por este motivo, Marifrán Carazo ha señalado que se ha optado por declarar la emergencia de esta obra, como se han hecho en estos últimos años en otras estructuras con patologías importantes, como el puente de hierro sobre el río Jándula en Andújar (Jaén), el puente entre Baza y Benamaurel (A-4200), el puente sobre el río Chico en Órgiva, el puente de La Barca de la Florida en Jerez de la Frontera, el puente sobre el río Alhama en Santa Cruz del Comercio o el más reciente del puente sobre el arroyo Salado en Montellano (A-8128).
La intervención, que se ejecutará en este año 2021 con un plazo de ejecución de seis meses una vez designe a la empresa adjudicataria, contará con una inversión superior a los dos millones de euros y “supondrá una rehabilitación completa del puente”.