El Ayuntamiento de Ayamonte alerta a la población de la presencia de algunos ejemplares de “Carabela portuguesa” en la playa de Isla Canela, por lo que pide a los bañistas que extremen la precaución y procuren evitar todo contacto con ellas.
Se trata de la Physalia physalis, una especie de “falsa medusa” que resulta extremadamente tóxica por el veneno que desprenden sus tentáculos y cuya picadura puede ocasionar temblores, diarrea, vómitos y convulsiones, aparte de las habituales lesiones en la zona que ha mantenido contacto con el animal.
Desde el consistorio se pide a los ciudadanos “prudencia” para evitar que se produzcan picaduras de esta especie que posee una potente toxina, según ha señalado el concejal de Playas, Francisco Cristóbal, quien ha pedido a los bañistas que, “en caso de observar la presencia de algún nuevo ejemplar en la playa, lo comunique al Ayuntamiento a través de los servicios de Protección Civil”.
El 112 desaconseja frotar con las manos la zona afectada ni usar toallas, arena o barro. Se deben retirar los restos de filamentos adheridos a la piel con ayuda de unas pinzas o de algún elemento rígido, como un carné o tarjeta. También es aconsejable examinar si han quedado restos de filamentos adheridos al bañador, ya que pueden permanecer activos durante días.
A continuación, el 112 recomienda limpiar la zona afectada con abundante agua salada –nunca agua dulce– y ponerse hielo dentro de una bolsa, evitando el contacto con la piel, ya que el frío ayuda a reducir la inflamación y mitigar el dolor.
No se deben aplicar vinagre, amoníaco reducido, alcohol u orina, porque podrían aumentar el riesgo de infección. Además, hay que evitar la exposición al sol. Además, considera fundamental tranquilizar a la persona que ha sufrido la picadura y hacerle entender que su vida no corre peligro.