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Con más de 800 kilómetros de costa, las playas de Andalucía son para todo el que las visita un oasis de paz, naturaleza y sinónimo de belleza y bienestar.
Todo un patrimonio natural con personalidad propia en el que se mezclan playas de arena blanca, calas escondidas y la particularidad de ser el nexo de unión entre el Atlántico y el Mediterráneo .
El litoral, desde la Costa de Almería, la Costa Tropical granadina, la Costa del Sol en Málaga o la Costa de la Luz de Cádiz y la Costa de la Luz de Huelva, conforma un paraje natural idílico, unido al sol que nunca abandona a esta comunidad. Con más de 3.200 horas de sol al año, Andalucía es paraíso y sus playas el escenario perfecto para disfrutar de estos meses de verano.
Playa de la Gaviota-Punta del Caimán.
Y si hablamos de horas de luz, es la Costa de Huelva la casa del sol. Por su costa se esconde la luz y los días se alargan casi eternamente en un entorno que invita a disfrutar de las mejores puestas de sol desde la orilla de su costa.
Mapa de la Costa de la Luz de Huelva.
Doñana, la más bella
No podemos comenzar nuestro recorrido por la costa de Huelva sin hacer una parada en la Playa de Doñana, la más larga de España con 28 kilómetros de arena blanca. Pero es que Doñana es mucho más que playa; es todo un complejo mosaico de paisajes y naturaleza, siendo el hogar perfecto para las aves que habitan sus paisajes: Doñana se corona como el humedal más importante de todo el continente europeo.
Fauna de Doñana.
No hace falta marcharse muy lejos para disfrutar de paisajes que bien podrían enmarcarse en el mismísimo Caribe: arena blanca que se escapa a nuestra vista y un horizonte enmarcado por dunas, pinares y el Océano Atlántico como su gran telón de fondo. Un paisaje espectacular que desde Doñana nos invita a acercarnos a sus dunas en movimiento entre Matalascañas y la desembocadura del Guadalquivir.
Playa de Doñana.
Y si seguimos avanzando por sus más de 120 kilómetros de playa, nos adentramos en el corazón de la Costa de la Luz de Huelva. La playa de Mazagón con su inconfundible Rompeculos, llamada de esta forma por lo complicado que era antiguamente el acceso.
Playa de Mazagón.
Mazagón sorprende a los visitantes por sus playas vírgenes y de baja afluencia; sus acantilados que forman una barrera natural para los pinos piñoneros que saludan al Atlántico y donde también es frecuente encontrar manantiales naturales de agua dulce que descienden hasta la orilla. Todo un espectáculo ante los ojos del que disfruta de su 9.000 metros de costa.
Punta Umbría, la más viva
La playa de Punta Umbría es una de las más populares y visitadas por los onubenses. Y es que Punta Umbría, a tan solo 20 kilómetros del centro de la capital, no es solo infinitas playas, sino que es música, ambiente, luz y mucha vida. Con numerosos establecimientos a pie de arena, se puede disfrutar de un atardecer junto al mar y mientras degustamos la rica gastronomía onubense.
Gastronomía de Huelva.
Y una vez que cae la noche, sus playas son el escenario perfecto de horas de baile hasta el amanecer.
Playa de Punta Umbría.
Camino del Guadiana
Si caminamos rumbo a la zona más occidental de la costa de Huelva, aún disfrutaremos de kilómetros de arena blanca a nuestro paso. El Portil, La Antilla, Islantilla, Isla Cristina, Punta del Moral e Isla Canela hasta llegar a orillas del Guadiana y fundirnos con el Algarve portugués.
Playa de la casita azul.
Y es que esta zona de la Costa de La Luz es belleza por los cuatro costados y es también sinónimo de aventura. A los más inquietos no les defraudarán las numerosas actividades que se pueden practicar en sus playas.
Una excursión en kayak, practicar kitesurf en Isla Canela o probar el paddle surf por las marismas del río Piedras y la Flecha del Rompido, así como disfrutar de horas de golf en los inmejorables campos de la provincia. Y es que Huelva, además de Decana, también fue la cuna del golf en España.
‘Contenido ofrecido en colaboración con la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía’
