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Es difícil de comprender cómo un equipo que vive institucional y económicamente al borde de la quiebra, siga demostrando en la pista ser uno de los mejores de España a pesar de las enormes dificultades por las que está atravesando día a día. Pero así es, ya que el Club Baloncesto Conquero volvió a sumar en la tarde-noche de ayer una nueva victoria a su casillero en Liga Femenina, la séptima de manera consecutiva, ante Unigirona, uno de los candidatos al play-off por el título, por 76-68.
Y lo que más mérito tiene es que lo logró con sólo seis jugadoras durante todo el partido, ya que el resto de integrantes de la plantilla son jugadoras juniors y sin experiencia en una competición tan exigente como es la Liga Femenina Española de baloncesto. Así las cosas, las americanas Cadlwell, Peters o Elonu están jugando casi una media de 40 minutos por partido, al igual que Roso Buch, la escolta catalana, ya que tras la marcha esta semana de la capitana Itziar Germán, además de las salidas en anteriores días de María Asurmendi, María Pina y Luci Pascua, han dejado el plantel onubense con lo puesto y sin recambios para el tramo decisivo de la competición.
Grandísima temporada en el plano deportivo del CB Conquero, que tiene un pie y medio en los play-off por el título de liga pero nefasta gestión económica de un club que está abocado a la desaparición si no es capaz de encontrar liquidez económica a corto y medio plazo.
