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El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Cartaya, David F. Calderón, ha presentado una iniciativa al pleno municipal del próximo martes con la que pretende “hacer de Cartaya un lugar más verde y habitable” con un plan de reforestación de árboles urbanos y la protección de los ejemplares más emblemáticos de la localidad.
Así, la iniciativa pretende que se realice un inventario arbóreo de Cartaya y publicarlo en la página web del ayuntamiento con reseñas sobre la historia de los ejemplares más antiguos, realizar una campaña de sensibilización en los centros educativos, para concienciar sobre la importancia de proteger el patrimonio arbóreo y elaborar un plan integral de reforestación, para compensar la tala de árboles, los ejemplares perdidos en los temporales y aumentar el número de árboles en el municipio, ya que “actualmente son muy pocos los ejemplares en el casco urbano y, sobre todo en las nuevas urbanizaciones”.
Calderón también propone impulsar modificaciones en las ordenanzas municipales para contemplar la protección del medio natural y las zonas verdes del municipio incluyendo artículos para la “Protección de la flora ante obras públicas o privadas” que garantice el mantenimiento de los árboles previamente catalogados frente a cualquier desarrollo o modificación urbanística.
Por último, el concejal de IU pretende que se incluya en la normativa urbanística la exigencia de la incorporación de dotación arbórea con una adecuada selección en cantidad, ubicación y selección de especies, tanto para nuevos desarrollos como para cualquier modificación de las estructuras existentes como la peatonalización o la reforma de plazas.
Según Calderón, “el planeamiento urbanístico no ha integrado adecuadamente a los territorios en la naturaleza, mermando la mayor parte de la vida silvestre”, una situación generalizada de la que ya han advertido en la Comisión Europea, que aprobó la ‘Estrategia de la UE sobre la biodiversidad de aquí a 2030: reintegrar la naturaleza en nuestras vidas’ cuyo objetivo es proteger y recuperar la naturaleza, marcando acciones y principios que ayuden a conservar la biodiversidad.
Por su parte la Organización Mundial de la Salud también ha establecido que son necesarios de 10 a 15 m2 de zona verde por habitante, y al menos un árbol por cada tres habitantes. También “está demostrado que la vegetación mitiga el calentamiento urbano, ahorra energía y mejora el confort térmico y húmedo del entorno”, motivos más que suficientes para que “esta iniciativa sea aprobada”, ha señalado Calderón.
