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La agrupación de los cuerpos de la administración de instituciones penitenciarias (Acaip) ha iniciado esta mañana hasta el 1 de septiembre la campaña solidaria «Cada agresión, una donación», mediante la que prevé cientos de donaciones de sangre entre los trabajadores de estos centros y demandar más medios para evitar las agresiones.
Hasta la fecha, hay inscritos más de 360 trabajadores, que donarán su sangre en los centros de donantes de todas las provincias del país y 108 en Andalucía. Cada una de las donaciones refleja el número de agresiones sufridas por algún funcionario del país.
Así, desde el sindicato se solicita al ministerio del interior que se adopten medidas efectivas para la eliminación de las agresiones. De hecho, José Juan Serrano asegura que no entiende por qué el Gobierno deja fuera al colectivo del protocolo para la lucha contra las agresiones en la administración general.
